Poner en el espacio público de la ciudad elementos de memoria y un sencillo homenaje para recordar a quienes el terrorismo y la violencia vulneraron su derecho a la vida en nuestra ciudad y reconocer a cada víctima en un plano igual, homogéneo e individual, para recordar la injusticia que sufrieron y ayudarles a reparar el daño causado. Todo ello basado en el documento “Retratos municipales de las vulneraciones del derecho a la vida en el caso vasco. San Sebastián 1960-2010."
El día en que se inauguran los elementos memoriales, se celebra un sencillo y emotivo homenaje: una ofrenda floral y un minuto de silencio. Participan familiares, representantes institucionales y ciudadanos en general.
El elemento conmemorativo consiste en una placa conmemorativa individual colocada a ras de suelo. En ella aparecen el nombre de la persona fallecida, la fecha del atentado y su autor. Se diferencian por el color, por el tipo de victimario.
Los elementos de memoria se pusieron en marcha en 2019, pero previamente la Comisión de Derechos Humanos y, en especial, la Alcaldía y la Delegación de Derechos Humanos han llevado a cabo un estrecho y atento proceso de relación y consenso con las familias que ha permitido hacer posible esta iniciativa de justicia restaurativa.
Las familias de las víctimas eligen participar o no en este proyecto y es un proceso que respeta sus tiempos, emociones y deseos. Sin imposiciones, sin prisas.
Es difícil determinar el número de homenajes y el momento en el que se van a realizar, ya que es una decisión personal y que requiere una gestión muy personalizada. La iniciativa, por tanto, quedará abierta en el tiempo y se prolongará hasta que las familias de las víctimas expresen su voluntad de participar.