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Aprobada definitivamente la nueva Ordenanza de Eficiencia Energética de la Edificación
Se deroga la hasta ahora vigente, en vigor desde 2009
La nueva norma municipal pretende impulsar una alta eficiencia energética tanto en los edificios nuevos como en los existentes, así como el aumento de la implantación de las energías renovables en la edificación. Por lo tanto, busca reducir la huella energética y de carbono del parque edificado a la vez que se aumente el confort climático interior de los edificios de manera medioambientalmente más sostenible.
Antecedentes:
El 1 de junio de 2009 se aprobó la Ordenanza Municipal de Eficiencia Energética y Calidad Ambiental de los Edificios para la fijación y la exigencia de criterios ambientales y de eficiencia energética en los edificios de nueva construcción y rehabilitados de la ciudad. Pasados más de once años desde su aprobación, se ha redactado una nueva Ordenanza con el fin de adaptarla a la nueva normativa vigente y a las exigencias derivadas de los compromisos adquiridos por el Ayuntamiento en materia de eficiencia energética y lucha contra el cambio climático.
Con la ordenanza que ahora se deroga, en el periodo 2009-2020, se han ejecutado, o están en la actualidad en fase de ejecución, más de 2.000 obras que han incorporado los criterios energéticos y ambientales de la norma. Por lo tanto, se considera que el impacto que una ordenanza como ésta tiene sobre el parque edificatorio municipal es alto. Aproximadamente, el 70% de las obras han correspondido a rehabilitaciones hechas en la envolvente térmica de los edificios residenciales (fachadas, cubiertas, terrazas,…), el 18% a licencias de obra mayor de construcción (edificaciones nuevas y grandes reformas en edificios existentes), el 8% a obras en vinculadas a alguna actividad y, finalmente, el 4% a derribos de edificios.
Respecto al nuevo documento, se ha realizado una adaptación normativa a la actualmente en vigor tanto en ámbito estatal como en el autonómico. Por una parte, dos normas de ámbito estatal que regulan las prestaciones energéticas del edificio han sufrido modificaciones: el Código Técnico de Edificación CTE (BOE 27/12/2019) y el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE). La nueva Ordenanza asume los cambios realizado en ellas. Por otra parte, la producción y gestión de los Residuos de Construcción y Demolición, y la Certificación Energética de los Edificios ya se encuentran reguladas por sendos Decretos. Por lo tanto, se han eliminado dichas exigencias de la antigua ordenanza que regulaban esos ámbitos para evitar duplicidades.
Asimismo, la revisión que esta Ordenanza hace de las exigencias en el sector de la edificación de materias de ahorro de energía y de incorporación de energía procedente de fuentes renovables resulta imprescindible para el progresivo avance hacia una economía baja en carbono competitiva en 2050, objetivo con el que se ha comprometido este Ayuntamiento.
Objetivos de la ordenanza:
Esta nueva Ordenanza promueve la implementación de medidas de diseño, ahorro, eficiencia energética y utilización de energías renovables en los edificios e instalaciones ya sean nuevas o existentes, y de titularidad pública o privada. Así, es objetivo de esta Ordenanza la obtención de un desarrollo edificatorio energéticamente eficiente tanto en lo nuevo como en el existente, dando ese modo continuidad al camino iniciado con la anterior ordenanza de eficiencia energética. A tal efecto, se regulan la limitación del consumo y de la demanda energética, eficiencia en las instalaciones y la introducción de energías renovables, alternativas y limpias.
Además, otro de los objetivos de la nueva Ordenanza es la clarificación de su estructura y simplificación administrativa respecto a la anterior, facilitando su comprensión y a su vez agilizando la tramitación de la misma.
Así, la nueva Ordenanza Municipal de Eficiencia Energética en la la Edificación es una herramienta más para acercarnos a alcanzar los objetivos definidos en el Plan Acción Clima DSS 2050 de reducción de las emisiones municipales en 2030 en un 40% respecto al año base 2007, y en un 80% en 2050. Asimismo, garantiza unas mejores prestaciones edificatorias en los edificios construidos en la ciudad.
El nuevo texto entrará en vigor tras su publicación en el Boletín Oficial de Gipuzkoa.