Árbol Singular
Los Árboles Singulares son patrimonio comunitario, una gran riqueza viva que tenemos en la ciudad, que tenemos que cuidar de para que sigan enriqueciendo con su naturaleza y singularidad el entorno en el que vivimos.
Este majestuoso olmo adorna uno de los extremos de la campa superior de Cristina Enea conteniéndola como fondo. Es un árbol centenario que fue plantado al inicio de ejecución del jardín según las directrices del jardinero paisajista Pierre Ducasse, diseñador del jardín en 1864.
Este imponente olmo es un gran ser vivo, tiene más de 4 metros de perímetro de tronco y su copa tiene un diámetro de más de 25 metros,
Se encuentra en buen estado, a pesar de que en algún momento ha sufrido podas que han alterado su crecimiento natural, su estructura es equilibrada.
Es el hogar de muchos animales, invertebrados, aves y pequeños mamíferos que encuentran refugio, lugar de alimentación y sitios para anidar.
El enorme olmo de Cristina Enea es uno de los pocos olmos que sobrevivieron a la pandemia de la grafiosis que diezmo los olmos de Europa. Antes el olmo era una imagen común imperiosa que acompañaba los paisajes rurales y urbanos, llenos de simbolismo, siendo el árbol de muchas plazas de pueblo bajo el que se reunía la gente desde muy antiguo, para disfrutar de su sombra o realizar actos más solemnes.
Distribución
El olmo es originario de Europa central y del sur y la región del Cáucaso, en zonas de bosques y tierras no labradas encontrando su óptimo en zonas hasta los 1000 metros de altitud.
Ha sido cultivado desde tiempos remotos, desde la Edad de Bronce, fue profusamente cultivado por los romanos y los límites de su distribución original son difíciles de precisar. La enfermedad fúngica de la grafiosis ha reducido drásticamente su presencia por toda su zona de distribución.
Descripción
El Ulmus minor es un gran árbol caducifolio de porte elevado y robusto, que puede alcanzar una altura de hasta 40 m. Su copa amplia y redondeada, de follaje denso, proyecta una sombra intensa
Su tronco es recto, grueso, muy ramificado y algo tortuoso suele estar ahuecado en la madurez.
La corteza es, arrugada y esta surcada longitudinalmente. Sus hojas son ligeras y elegantes desarrollando una copa densa. Las flores aparecen antes que las hojas.
Los frutos son sámaras que tienen una superficie alada que le permite dispersarse lejos de la planta madre con gran éxito.
Usos
Como árbol se usa para la reforestación y para consolidar terrenos. Hoy en día se utiliza en árboles viales, parques, jardines y como cortavientos.
La madera del olmo es de buena calidad y es fácil de trabajar, difícil de resquebrajarse y muy resistente a la putrefacción si se mantiene húmeda, por lo que se ha empleado tradicionalmente en construcciones navales, pilotes de mina y conducciones de agua.
Actualmente, se utiliza en la producción de madera contrachapada y para diversos trabajos de carpintería y construcción. No hace buena leña. Sus hojas son proteicas y de fácil digestión por lo que se utilizan como forraje cuando el pasto está agotado.
El olmo ha sido uno de los árboles más presentes en nuestro entorno, adornando y dando sombra a las principales plazas de los pueblos, donde era un lugar de reunión preferido. La enfermedad de la grafiosis ha hecho desaparecer a este árbol de nuestros paisajes, diezmando las poblaciones naturales y las plantadas en parques y jardines.
La grafiosis,es una enfermedad de los olmos producida por un hongo transmitido por un escarabajo que vuela a más de 16 metros de altura, e infectando sólo aquellos árboles que superen esta altura.
El olmo para protegerse del ataque de este hongo tiene la estrategia defensiva de bloquear las ramas infectadas, secando esa parte del árbol. Como el hongo avanza más rápido que los bloqueos, acaba secando al árbol. Se han introducido especies, como el olmo de Siberia Ulmus pumila y especies híbridas, más resistentes a la enfermedad.
Ecología
Crece en zonas de clima templado, sobre suelos frescos y profundos, principalmente junto a cursos de agua donde se asocia con frecuencia con otros árboles de ribera.
Este olmo tiene una gran tolerancia al frío, la sequía y la contaminación del aire. Desarrolla sobre todo tipo de suelo, pero prefiere los suelos calcáreos, arcillosos y profundos, aunque también lo podemos encontrar en suelos más pobres.
Procedencia
Europa
